miércoles, 22 de octubre de 2014

La palabra escrita. Análisis: "La senda de los héroes: El anillo del hechicero"

 ¡Saludos, camaradas! Aquí Sir Francis, un día más.

 Hoy me toca abrir otra nueva sección del blog, titulada la palabra escrita. En esta sección hablaré de todo un poco acerca del mundo de los libros: desde noticias sobre sagas famosas, curiosidades, reseñas y análisis de libros que voy leyendo hasta algunas creaciones propias que iré compartiendo con vosotros, lectores. Para empezar, hablaré del análisis de "El anillo del hechicero", primer volúmen de la saga "La senda de los héroes", de la autora Morgan Rice. ¡Vamos allá!

                                La senda de los héroes: el anillo del hechicero




Todo lo que tenga la palabra "Héroes" en la portada ya me llama la atención. ¿Por qué será? xD

 Hacía ya algún tiempo que no le hincaba el diente a una novelilla juvenil de fantasía y, mirando la web de la Fnac antes de Reyes en busca de un libro que poder pedir de regalo, me hallé con la sinopsis de este volumen.

 La senda de los héroes es la primera entrega publicada en nuestro país (de, hasta la fecha, siete y una octava en camino) de la saga “El anillo del hechicero”, de la autora Morgan Rice. Cuando abrí el libro en la mañana de Reyes y leí la sinopsis, me di cuenta que, tras lo que ya sabía con anterioridad, me indicaban las influencias de la autora: Suzane Collins (autora de los Juegos del Hambre, una buena trilogía que para mi gusto se viene abajo al final), Anne Rice (qué decir de la que considero la madre del género vampírico) y (horror, chan chan chan chaaaaan) Stephenie Meyer, la famosa autora de Crepúsculo (unos libros que aún no he tenido el “placer” de leer pero habida cuenta de toooodo lo que me han hablado de ellos y lo que he medio-visto, no es que me atraigan demasiado, la verdad). 

 Esto último ya me picó un poco en el ánimo, dado que no soy fan de Crepúsculo, precisamente. Pero como las influencias son solo eso, influencias, allá que abrí el libro y comencé a devorarlo.
 ¿Qué decir de esta primera entrega? Para empezar que, a todos aquellos/as que vengan buscando decapitaciones gratuitas Martinianas o extensas descripciones Tolkianas… se han equivocado de sitio. Este libro es como una introducción, o así lo veo yo, a la literatura fantástica medieval. Es una historia sencilla, llena de tópicos, que rebosa calidez y, pese a su simpleza, te va atrapando poco a poco (me ventilé el libro, que tampoco es muy largo la verdad sea dicha, en tres días), a excepción de algunos detalles algo… cogidos con pinzas, podría decirse.

 La historia narra la vida de Thorgrin, un joven pastor de una aldea perdida entre Pinto y Valdemoro que quiere ser seleccionado en una leva para formar parte del ejército de su majestad. La señora Rice nos desgrana las aventuras y desventuras del joven Thor y de cómo se aventura fuera de su pueblo para conseguir su meta pese a todo cuanto tiene en contra. De los amigos y enemigos que hace, de los primeros amores, de las primeras aventuras… en fin, un poco la introducción de lo que será la saga. Hasta ahí todo bien. 

 Sin embargo, (y aquí intentaré no hacer muchos spoilers) hay algunas partes que pese a todo, pueden chirriar al lector, sea avezado o no. Para empezar, hay algunas partes muy “Deus ex Machina”, en mi opinión, y eso no queda bien ni para niños ni adultos. A saber, por ejemplo, la facilidad que tiene la autora de definir a sus personajes con una dualidad neutral que cojea un poco: el rey es sabio/bondadoso y borracho/cateto; la reina amable y calculadora/fría a la vez; la princesa rebelde y recatada, el mismo protagonista apaleado por la vida y al que todo le sale bien...

 A tenor de esto último, para que os hagáis una idea, Thor es un marginado al que han tratado a palos toda su vida y, cuando sale de su pueblo, parece que le bendice algún dios de la buena suerte, dado que todo le sale bien. Si creíais que personajes como Harry Potter o Jon Nieve eran los niños bonitos de sus autores… ¡estáis muy equivocados! ¡unos auténticos “pringaos” al lado del amiguete Thorgrin, eso es lo que son!.
Como Destino de Caballero, pero sin Queen
¿Qué hay una bestia enorme y sádica? Thor se la carga sin ninguna instrucción militar ni de combate previa, a raíz de buena suerte y unos poderes que, al margen de saberlos controlar, acuden en su ayuda en el momento preciso. ¿Qué el campeón del reino y caballero renombrado corre peligro? Thor le salva la vida sin saber cómo y recibe honores del rey y su corte. ¿Qué hay algún animalejo super raro de encontrar que significa un buen augurio? Adivinad quien lo encuentra cuando va a hacer aguas menores al bosque… (esta parte me hizo reír bastante, la verdad)
Otro detalle que me resultó cómico es la facilidad que tiene el protagonista para sentir apego hacia personas que acaba de conocer. Un ejemplo:
“- ¡Hola, soy un pueblerino al que la vida ha tratado como a una auténtica mierda y vengo a la corte del rey a recibir instrucción de soldado raso! ¿Quieres ser mi amigo?
- ¡Claro! ¡Seamos amigos, amable desconocido!
En ese momento Thor sintió que serían amigos inseparables, como hermanos. Era como si ya le conociera de toda la vida”

 A ver… si es un joven maltratado por la vida ¿no debería ser un poco mas desconfiado antes de “hacer hermanos” a la primera de cambio? ¿No deberían desconfiar un poco más los demás de un muchacho que ha entrado en la legión del rey de una forma algo inusual?
 Hay escenas totalmente absurdas de “amistad desmedida” que creo que serían mejor tratadas de haber hecho una novela más larga, o haberlas ido encauzando poco a poco durante la saga. Da la impresión de que la autora se quiere saltar a la torera esas “tediosas” escenas de acercamiento entre personajes y pasar al “y vivieron felices siendo super amigos”. ¿Qué habría sido de la profunda amistad entre Légolas y Gimli si desde el principio hubieran ido de la manita a recoger florecillas por el campo? Pues que nos habría chirriado a todos,claro está.
"Dejad que las bestias se acerquen a mi"
Y lo mismo pasa con los animales y Thor, cuando nos presenta al típico bicho de turno que sabes que le va a sacar las castañas del fuego a lo largo de la saga (rollo “El señor de las bestias”, vamos) y es verlos y decir “sintió que estarían juntos por siempre y serían grandes amigos”. ¿¡Qué huevos vas a sentir ni qué!? ¡¡Que es un puñetero halcón, por dios!! ¿Qué hace, te mira con arrobo? ¿Te da besitos por las noches y te arropa? Tendría más lógica algo rollo Eragon y Saphira, de cómo la cuida desde que es una larva hasta que crece, no sé… Poco a poco. Da la impresión de que a la autora lo que le gusta es la chicha y los prolegómenos que se los imagine el lector.

 Finalmente, hay algunas otras partes llenas de despropósito, tirando al final del libro, en las que Thor tiene que impedir cierto acontecimiento vaticinado y, en lugar de estar a la espera de que pase para detenerlo, se va a dar una vuelta por el campo. ¡Olé! ¡Sí señor! Tu vete a cabalgar, que si matan a alguien en tu ausencia, le vayan dando. Algo habría hecho. O tratando con una absoluta falta de respeto a personajes como el rey o el conde de tal sitio, sacando los pies del tiesto pero ¡ey! No pasa nada, es Thor, todo se le perdona. Los guardias le podrían haber dado un buen par de golpes, pero no, dejadle que grite a su majestad que así nos entretenemos.

 Resumiendo, en general el libro está entretenido si obviamos esas partes y esos detalles tan inverosímiles sin venir a cuento. Una lectura sencilla que hará las delicias de los más jóvenes de la casa o, como en mi caso, del lector que quiera entretenerse con una aventurilla de princesas y dragones a la vieja usanza, como las historias que nos contaban antes de dormir (al menos en mi caso, con tanto Arturo y Camelot, así he salido yo). Pese a todo y con esta crítica, quedo a la espera de las siguientes partes de la historia y ver como sigue la cosa. A ver si mejora un poquillo más o, al menos, se mantiene en sus trece, lo cual es a veces de agradecer en estos temas.

Si el prota hubiera lanzado rayos como su tocayo, hubiera molado mucho más aún. Pero todo se andará...


Nota final: 5/10

 Y hasta aquí por hoy. Nos veremos próximamente, como siempre, por estos lares. Hasta entonces.

¡Buena luna!


lunes, 20 de octubre de 2014

Frikianálisis: Kochikame

¡Saludos, camaradas! Aquí Sir Francis, un día más.

 Hoy inauguro una sección de mi blog a la que he decidido llamar "Frikianálisis" (originalidad al poder, ¡wuuuu! xD) en la que iré hablando de todo lo que nos llega a las nobles gentes frikis del señor como un servidor. Y me refiero, como no, a mangas, animes, series, videojuegos y demás parafernalia del mundillo. En este caso, le toca el turno a un anime clásico, de los que llevan muchísimos años en la parrilla, y del que no había tenido el placer de ver nada hasta hace unos meses. Me refiero a Kochikame. ¡Así que vamos a ello!

                                                  Frikianálisis: Kochikame


 Allá por el año de nuestro señor de 1976 (Octubre, más concretamente), aparecía en la revista japonesa Shonen Jump (una revista semanal de cómic japonés) un manga de Osamu Akimoto titulado Kochira Katsushika-ku Kameari Kōen Mae Hashutsujo, que viene a significar "Comisaría del parque de Kameari, distrito de Katsushika", popularmente conocido como Kochikame. Se trata de una serie que narra las aventuras y desventuras de un departamente de policía del mencionado parque y, concretamente, de uno de los policías que allí trabajan: Kankichi Ryotsu.

Personajes

- Kankichi Ryotsu (Ryo)- Es el protagonista del manga/anime. Se trata de un policía de unos 30 y tantos años con la mentalidad de un crío, al que le gusta de todo menos trabajar. Siempre está inventando planes para enriquecerse rápidamente (si es a costa de los demás, mejor que mejor), desde montar una atracción del terror con fantasmas de verdad hasta crear un modelo de figura multiarticulada sobre sí mismo.
Va ataviado con el típico traje de policía japonés de color azul con los brazos arremangados y unas sandalias de madera tradicionales en lugar de zapatos. El icono más característico del personaje es, quizás, las enormes cejas que tiene unidas sobre el ceño, en forma de eme. Le encantan los videojuegos, las maquetas y demás aficiones otaku, de ahí que siempre esté rodeado de críos que van a pedirle consejo o de comerciantes del barrio que van a que salde las deudas que tiene por todos lados.

- Jefe Daijiro Ohara- Es el jefe de la comisaría, un hombre serio y responsable al que el trabajo de policía le va como anillo al dedo. Precisamente por esto, es todo lo contrario a Ryotsu, y es por ello que su subordinado está todos los días sacándolo de sus casillas. Su palabra favorita (al menos en la traducción al castellano)
es "ceporro", que es como siempre está llamando a gritos a Kankichi cuando este se extralimita con sus planes causando grandes estropicios que ponen en ridículo al cuerpo de policía de Kameari. Pese a todo, y a tener que estar siempre regañando y castigando a Ryotsu, es un hombre bondadoso que lo único que desea es que su subornidado sea un poco más responsable para evitar quebraderos de cabeza a todo el mundo.

- Keichi Nakagawa- Un joven policía que llega de estudiar de EEUU. Va ataviado con un uniforme de policía amarillo. Es hijo de un gran empresario japonés, y está acostumbrado a grandes lujos como conducir coches de lujo que usa en su trabajo policial. Pese a todo, es bastante modesto y trata a Ryotsu con el calificativo de "señor", pasando a ser su subordinado y a verse abocado a seguirle el juego en sus locos planes. Dado su atractivo, es la comidilla de todas las policías de la comisaría central, que no pierden oportunidad a la hora de intentar agasajarle.

- Reiko Akimoto- Es el personaje femenino por excelencia de la serie. Una atractiva joven de largos cabellos rubios que lleva un uniforme rosa. Es hija, también, de multimillonarios, aunque nada de esto la hacen ser una dulce mujer indefensa, más bien lo contrario. Reiko es una mujer de armas tomar que en más de una ocasión se encarga de pararle los pies a Ryotsu. A pesar de que este consigue sacarla de sus casillas en más de una ocasión, siempre que necesita su ayuda para alejar a algún pretendiente dispuesto a casarse con ella, Ryo es el primero en echarle una mano (a cambio, como no, de dinero o una suculenta cena de por medio).

- Yoichi Terai- El último componente fijo de la comisaría del parque Kameari. Un policía regordete y bonachón con gafas que siempre está al tanto de lo que ocurre por la zona. Su caracter bonachón le impide enfadarse ante las trastadas de Ryo y los jaleos en los que mete a todos sus compañeros. Pese a que se toma muy en serio su trabajo de policía, su lugar suele ser detrás del papeleo constante, sin haber llegado nunca a detener a ningún criminal (por el momento).

- Ai Asato (María)- Es otra joven policía morena ataviado con un uniforme púrpura que está locamente enamorada de Ryotsu, haciendo lo imposible (desde cocinar para él a convencer a su padre, el propietario de un dojo de artes marciales, para que le incluya en sus negocios) para lograr que se fije en ella. Pese a su apariencia delicada, posee una enorme fuerza física y sabe todo tipo de técnicas de combate, desde artes marciales hasta boxeo. Puede que esta chica tenga un as o dos bajo la manga que hagan que su historia no sea todo lo normal que podría ser (para no andarme con spoilers innecesarios, jeje)

- Hayato Honda- Un policía de lo más peculiar y el mejor amigo de Ryotsu, dejándose arrastrar a todo tipo de locas aventuras por éste. La principal peculiaridad de este personaje es que mientras camine por ahí es un hombre tímido, amante de los manga shojo (cómics de romance más propios de mujeres) y de las cantantes idol (generalmente niñas que cantan pop), costándole hablar sin tartamudear o mirar azoradamente al suelo. Ahora bien, en cuanto sube a su preciada motocicleta de policía y se pone el casco y la bufanda, se convierte en una persona totalmente diferente, con una actitud de motero duro y chulo amante del peligro, las piruetas y los grandes saltos a lomos de su vehículo. Es por ello que siempre que hay que llevar a cabo una misión especialmente peligrosa, le mandan junto a Ryo a completarla.


 Estos son los personajes más o menos asiduos de casi todos los capítulos, llegándonos a encontrar con todo un elenco de secundarios, desde un policía que duerme durante cuatro años seguidos y solo se despierta un día en el que es un auténtico superpolicía; hasta los padres de Ryotsu o dos agentes femeninas de tráfico a las que el protagonista saca siempre de sus casillas.

 El principal atractivo de la serie, al margen de la comicidad, las situaciones ridículas y gags chistosos es, a mi entender, que se pueden ver todo tipo de lugares, festividades y pinceladas del mundo japonés durante sus capítulos: desde una fiesta tradicional en la que tokiotas (habitantes de Tokio) llevan en alza santuarios móviles de pueblo en pueblo, hasta un típico (y desastroso) crucero en un barco tradicional japonés. Todo ello ha hecho que el fenomeno de Kochikame se extienda durante muchos años hasta nuestros días, quedando a la altura de grandes series como Detective Conan, Dragon Ball o Doraemon, entre algunas de las más longevas.
Tanto es el cariño que sienten los japoneses ante este personaje que repartidas por Tokio hay una serie de estatuas inspiradas en los personajes de la serie. O su aparición en diversos videojuegos propios o cameos en juegos de peleas como los de la saga Shonen Jump Super Stars. Incluso se han llegado a grabar tanto películas de imagen real (con actores japoneses interpretando los personajes) hasta un dorama (serie de televisión, tipo telenovela, inspirada en el anime en cuestión). Y es que parece que el bueno de Ryotsu va a seguir dando guerra por muchos, muchos años más.

 En mi opinión, es una serie que os recomiendo a todos dado lo ligerita que es y la gracia que hace. Además, al ser aventuras independientes no hace falta seguir un hilo argumental que haga imposible que la veas si te has perdido algunos capítulos (al margen de que pueden aparecer algunos personajes de los que ya se han hablado anteriormente, pero eso es apenas un detalle sin importancia dado que pronto te los integran en el hilo argumental del episodio sin mayor complicación). En resumen, si os gusta el anime entretenido o simplemente queréis pasar el rato y echaros unas risas, Kochikame es una serie a tener muy en cuenta.






Nota: 8/10


 Y hasta aquí por hoy. Espero que os haya gustado este pequeño análisis de la serie y que hayáis pasado un rato entretenido.

¡Buena luna! ¡Matta ne!







                                   

sábado, 18 de octubre de 2014

De vicio en vicio. Un paseo por Madrid Games Week 2014 (parte 2)

¡Saludos, camaradas! Aquí Sir Francis, un día más.

Hoy continuaré relatando mi experiencia durante el Madrid Games Week con la segunda parte y final. ¡Vamos allá!

                              Un paseo por Madrid Games Week 2014 (parte 2)

 Tras el vídeo de The Witcher 3, seguimos dando una vuelta y tomamos asiento en el stand de Sony para ver la presentación de Dead Island 2, un juego de zombies (la gran moda de hoy día, naturalmente) en primera persona. La primera entrega combinaba el género shooter y de supervivencia con el rol, consistiendo en ir buscando todo tipo de armas con las que equiparnos para cumplir una serie de objetivos que ayudaran a los supervivientes de la isla donde nos encontrábamos durante el surgimiento de la pandemia zombie. Tras aquél juego, sacaron otro, llamado Riptide, que venía a ser lo mismo pero que continuaba la historia del primero y nos ponía en una zona pantanosa donde continuar nuestra aventura.
"Disculpe, tiene algo en la cara: mi maza-cadena"
Con la llegada de este nuevo juego, en exclusiva para las consolas de nueva generación, la saga da un giro bastante importante y se centra más en el elemento de disparos que en el de rol, tornándose tanto como manejo como gráficamente parecido a un Borderlands. Visualmente muy colorido y con muchos puntos algo gamberros (como la posibilidad de combinar armas de motor con armas cortantes, o añadir elementos de fuego o electricidad a nuestra hacha o escopeta, por ejemplo), eso sin contar el prometedor multijugador online que ofrece con cuatro clases de personajes bien diferenciadas, son puntos a tener muy en cuenta a la hora de pensar en adquirir este título que cada vez está llamando más poderosamente la atención.

 Lamentablemente, tras la charla de rigor por parte de uno de los empleados de la compañía desarrolladora, en medio de la demo propiamente dicha, la reproducción se quedó colgada, momento que aprovecharon para una ronda de preguntas mientras intentaban darle solución. Paco y yo decidimos seguit explorando y fuimos a la zona de juegos indie donde nos encontramos con un conocido mío, Luis, que nos invitó a probar un juego de la creación del estudio en el que está metido, WasFan Studios, (www.wasfan.com) llamado Project C.E.L.L. En el, manejaremos a un glóbulo blanco con aspecto militarizado que ha sido introducido en el cuerpo para erradicar todo tipo de virus, aprender y, por ende, poder acabar con todas las enfermedades existentes. ¿Pero qué pasa cuando aparece una nueva enfermedad desconocida?
La mejor vacuna: fuego purificador
Que el protagonista se carga con todo tipo de armas y, al más puro estilo Diablo (vista desde arriba), va pegando tiros a todo bicho viviente que amenace nuestra buena salud. Pese a que el proyecto estaba en una fase de prueba temprana, he de decir que me sorprendió muy gratamente, dado que apunta maneras y originalidad, con unos acabados que nos hacen ver cómo vamos luchando por distintas partes del cuerpo, en distintos órganos, mientras nos abrimos paso entre hordas de todo tipo de bichos de lo más desagradables. Incluso contaban con un par de jefes de final de fase de gran tamaño, para grata sorpresa mía. Desde aquí os recomiendo que le echéis un ojo y estéis atentos al tema, deseándoles la mayor de las suertes para que el proyecto salga adelante tarde o temprano.

 Tras la cata de rigor, en la que llegué a pasarme al primer jefe antes de morir bombardeado por unos virus de lo más traicioneros, seguimos paseando y probando más cositas que nos habíamos dejado en el tintero, como Far Cry 4, que siguiendo la estela del anterior juego de la saga, nos transporta de nuevo a un juego en primera persona de disparos en un lugar perdido de las montañas del Himalaya, haciendo frente a un señor de la guerra de lo más psicópata pero carismático y con la interesante posibilidad de usar cosas y animales de nuestro entorno para hacerle la vida imposible al villano y sus secuaces (he visto imágenes en las que puedes hacer que un elefante destroce la puerta de un complejo y arrase con todo. Brutal, sencillamente brutal). Little Big Planet 3 también pasó por nuestras manos, que sigue siendo adorabilidad en estado puro. Al más puro estilo plataformero, añadiendo a la posibilidad de
Éramos pocos y parió la aguja de punto
creación de niveles, decoración de escenarios y de nuestro personaje Sackboy favorito, hemos de añadirle un elenco de otros tres personajes más con las que la diversión tanto en solitario como en multijugador será más grande: otro muñeco grandote que encoge a placer para entrar por todo tipo de recovecos, un perrete capaz de saltar por las paredes y engancharse a ellas y un pajarillo que puede llegar a transportar a otros compañeros por el aire. Toda la diversión que nos ha ofrecido esta saga multiplicada al cubo.



 Con poco mas que hacer, dimos una última vuelta y charlamos con viejos conocidos a los que hacía bastante tiempo que no veía, como Álvaro (popularmente conocido como Megamaníaco entre los colegas xD) y Jose David (compañero de tienda cuando empecé a trabajar para la empresa hace tanto años); y pudimos conocer a uno de los youtubers que, personalmente, mejor opinión me merecen y más interesantes son, como es el caso de OmegaKay (@OmegaKay), un chaval nintendero a más no poder (como este servidor que escribe y firma) y muy simpático, la verdad. De hecho acabó regalándome una chapica del Super Smash Bros que le dieron repetida, así que no me fui de vacío. Para completar los recuerdos del día, acabé llevándome bajo el brazo un Astérix de la Super Nintendo y una Hyperboy, que viene a ser un armatoste de los 80 con forma de máquina arcade donde se inserta la primera Game Boy (la gordica que chupaba la friolera de cuatro pilas por carga) y, además de hacer de lupa, tiene una lucecilla que para los tiempos en los que las consolas portátiles comenzaban su singladura por el mundo, está bastante bien. ¡Qué recuerdos cuando mi amigo del instituto Jesús me dejó la suya y estuve jugando al  Pokémon Rojo en ella!

Esto es tecnología punta, y no la Playstation 4


 Y así, con un poco menos de peso en la cartera y un poco más en sendas bolsas en cada mano (incluído un llaverico adorable de Kirby que me regaló Luis, traído desde Japón), salimos del recinto ferial con un buen dolor de piernas pero la sensación de haber aprovechado bien el día. En resumen, para todos aquellos/as que queráis ir a este tipo de evento, os animo a que por poco que os llamen la atención esto de los videojuegos, os paséis por allí (este año ya imposible, viendo la afluencia de gente y que acaba hoy, precisamente), dado que es una experiencia más y, os aseguro, que no os va a resultar indiferente, la verdad. Palabra.

 Por hoy se despide el que aquí narra, deseando que hayáis disfruta de la lectura y paséis un buen domingo. Y ahora, a desempolvar la Game Boy y darle cera al autoregalo que me he hecho, a ver lo bien que tira la tecnología retro.

¡Buena luna!


viernes, 17 de octubre de 2014

De vicio en vicio. Un paseo por Madrid Games Week 2014 (parte 1)

¡Saludos, camaradas! Aquí Sir Francis, un día más.

Dejadme aprovechar este primer acercamiento para daros la bienvenida a mi blog: el rincón de Sir Francis. Un pequeño pedacito en el ciber-espacio donde iré subiendo experiencias, reflexiones, análisis de libros, películas, series y videojuegos, gameplays... En definitiva, un lugar donde el libre albedrío será la norma que rija cada una de las entradas. Un sitio ecléctico, donde cada día podréis encontrar algo distinto; algo que, os guste o no, al menos os entretenga unos minutos. ¿No es esa la auténtica finalidad de los blogs, a fin de cuentas?

 Sin mas dilación, pues, os reitero mi bienvenida y deseo que lo paséis tan bien leyendo como yo escribiendo y llevando a cabo este blog. ¡Vamos a ello!

                                   Un paseo por Madrid Games Week 2014 (parte 1)

Viciaco del bueno, ¡alla voy!

 Para todos aquellos que no lo sepáis, España tiene desde hace varios años una convención anual donde se dan cita todo lo habido y por haber respecto al mundo de los videojuegos: Madrid Games Week. Ya desde pequeño me he sentido fuertemente atraído por este hobbie, tanto es así que a día de hoy estoy trabajando desde hace años en el sector de la venta de dichos productos. Y, como tal, no podía faltar a una cita tan importante, llevada a cabo durante este fin de semana. Así que, aprovechando que había caído en mis manos un pase VIP que nos acreditaba a mi y a Paco, un colega, para asistir el Jueves, día de entrada exclusiva a los profesionales del sector, allá que fuimos desde primera hora de la mañana.

 La feria tiene lugar en el recinto ferial IFEMA, Campo de las Naciones, en Madrid. Como tal, es un sitio bastante grande lleno de enormes salas para llevar a cabo eventos multitudinarios como es el caso. Al llegar en cuanto abrieron (a las nueve de la mañana), todavía no habían dispuesto todas las demo unit (consolas anexas a un televisor con su respectivo mando para poder probar una demo de un juego en cuestión. Una demo es la abreviatura de demostración, véase una muestra del juego completo, tal como una fase o un trozo jugable para hacerte a la idea del producto final), y algunos stand estaban todavía a medio montar y preparándose para el día.

 Paco y yo estuvimos dando una vuelta, localizando varios sitios que visitaríamos a lo largo del día para probar lo que nos podían ofrecer. Se daban cita las tres grandes compañías de videojuegos; Nintendo (mi favorita, sin ninguna duda), Sony y Microsoft; además de distribuidoras como Koch Media o Namco Bandai; estudios desarrolladores de juegos indie (juegos de bajo presupuesto, generalmente realizados por estudios pequeños o grupos de amigos, que buscan financiación o que alguna de las compañías grandes les tome bajo su tutela); amén de un stand de GAME, la famosa cadena de compra/venta de videojuegos y varios stands más pequeños de venta de videojuegos, sobre todo de carácter retro (juegos de consolas antiguas que son difíciles de encontrar en el mercado de hoy día, como Game Boy, Super Nintendo, Master System, etc...)

Aprovechando este primer acercamiento al lugar, pasamos a saludar a amigos y conocidos que habían ido allí a hacer negocios o, como nosotros, a pasar el día. Mención especial a Antonio y Román, que regentaban el stand de Kaoto Videogames (Twitter: @KaotoVideogames) y Luis, Carolina y Hugo, al frente de 16 Bits Era (Twitter: @16BitsEra), buenos amigos que llevan ya algún tiempo poniendo en marcha sus respectivos negocios de comercio de videojuegos retro y actuales, merchandising y demás frikeces para los amantes del género (como yo :P)

 Viendo que la feria empezaba a cobrar movimiento, nuestra primera parada fue en el lugar donde se podía probar la demo de The Order, 1886, un juego de PlayStation 4 que verá la luz el 20/2/2015. Dentro del stand, al que accedimos por unas cortinas negras, nos hallamos en una sala en penumbra en la que había montadas varias demo unit con sus respectivos asientos para probar el juego. Me acomodé en una, justo al lado de un maniquí caracterizado como uno de los protagonistas del juego
Dando caña a los licántropos desde 1886
y me dispuse a echar mi primera partida del día. He de decir que lo primero que me vino a la mente fue la saga Gears of War, puesto que la mecánica de este juego es muy similar: un shooter (juego de disparos) en tercera persona ambientado en una época victoriana con género steampunk (armas y armaduras de corte futurista). En la demo, de unos 10 minutos de duración, te situaban en una ciudad de corte londinense en medio de una refriega contra un grupo de insurgentes. Consistía en manejar a uno de los cuatro personajes del juego e ir cubriéndote tras barricadas y muretes mientras les freías, literalmente, a tiros (dado que el arma que llevaba dispersaba una nube de termita, una especie de gas, que luego podías prender disparando una bengala con otro botón del mando) De la historia poco me pude enterar, dado que el volumen, lógicamente, estaba al mínimo. Pese a la corta duración de la experiencia, me reafirmé a la hora de querer comprar el juego cuando salga (¿a quién no le gusta ir metiendo tiros contra todo tipo de enemigos, entre los que se incluyen licántropos y demás criaturas? :D)

 Tras salir del lugar, seguimos paseando y probando más cositas, como el Bloodborne (juego del director de Demon Soul y Dark Soul, que a mí personalmente no me han llamado nunca dada su alta dificultad. Este es más de lo mismo, solo que ambientado también en un mundo victoriano más tétrico y lleno de criaturas sobrenaturales que The Order. La demo acabó conmigo siendo apalizado por seis zombies armados con bieldos y guadañas. Deprimente para mi orgullo jaja) y el Tales of Hearts (juego de rol japonés de la famosa saga "Tales of" que saldrá el mes que viene para el sistema PlayStation Vita).

Finalmente, llegamos a uno de los lugares clave para mí: la zona de Nintendo. Un lugar repleto de demo units con las novedades y próximos lanzamientos de la gran N, tales como Bayonetta 2

"Soy una chica mala... y me gusta"
(juego de corte hack´n´slash, parecido al Devil May Cry, cuya primera parte vió la luz en PlayStation 3 y Xbox 360 hace años, llegando ahora para Wii U en exclusiva. En el, manejamos a una bruja de armas tomar y muy buen ver mientras vamos enfrentándonos a ángeles y demonios por igual al ritmo de los disparos de nuestras cuatro pistolas, dos en las manos y dos en los tacones de las botas. Demencial japonesada buena, buena), Mario Kart 8 (¿qué decir de esta saga que no se conozca ya? Posiblemente el mejor juego de carreras para jugar contra los amigos, en el que los famosos fontaneros de Nintendo y demás personajes de la saga se dan cita a lomos de delirantes karts para competir mientras se usan

A toda leche, y esta vez boca abajo si a mano viene
todo tipo de objetos para tener ventaja o desventajar a los rivales. ¿Queréis más? ¿He dicho que los coches tienen ruedas antigravitatorias para correr por paredes y techos en algunos tramos de los circuitos?) o el famoso Super Smash Bros, recientemente aparecido en 3DS y de próxima salida, en Diciembre, para Wii U (un juego de peleas nada convencional, en el que se dan cita los personajes más famosos de Nintendo y de varios videojuegos más como Pac Man, Sonic o Megaman, entre otros, inflándose la cara a tortas mientras usan todo tipo de objetos y ayudas de personajes secundarios que les lleven a la victoria).

 Pese a que Nintendo había centrado su atención en este último título, que esperan sea la joya de la corona durante las compras de la campaña de navidad (hasta tal punto que se celebraban torneos en una enorme pantalla en la zona), mis deseos eran otros. Por supuesto, no faltó la partidita de rigor al Smash Bros, pero me centré en localizar un par de demo units que ofrecían la prueba de Captain Toad: Treasure Tracker, Yoshi´s Woolly World y Kirby & the Rainbow Curse,
"Tiembla, fontanero, que ahora me toca a mí"
tres de los grandes títulos que esperan a la Wii U en el primer trimestre del año que viene. Tres juegos que destilan no ya amor, sino HAMOR, con H de HERMOSO, por sus cuatro costados. En ellos manejamos a Toad, la simpática seta de los juegos de Super Mario de siempre, en busca de todo tipo de tesoros en entornos cúbicos y tridimensionales que combinan plataformas y puzzles; a Yoshi, el famoso dinosaurio y montura de Mario, esta vez tanto el como todo su mundo hecho con lana y todos sus derivados, todo un prodigio gráfico sumamente agradable a la vista; y a Kirby, la famosa pelota rosa de Nintendo, que esta vez deja de engullir a sus enemigos para convertirse en una bola de plastilina a la que tendremos que guiar por todo un mundo de igual textura con ayuda del lápiz táctil y el GamePad (el mando de la pantalla, vamos) de la Wii U. Tres juegazos, con mayúsculas, que ayudaran a que la consola de sobremesa de Nintendo se siga vendiendo más a cada nuevo título que salga.
Esto es habilidad con el ganchillo, y no la de la abuela

Amor en estado puro, ahora con un 100% más de ácido esteárico

 Satisfecho, pues, de mi sed nintendera (por el momento... bwahahaha) seguimos paseando y nos acercamos a la cola para entrar al que considero que será el GOTY (Game of the Year, juego del año) del 2015 (junto al Uncharted 4, por supuesto, si ve la luz a finales del año que viene): The Witcher 3, Wild Hunt. Para todos aquellos que no conozcan la saga de libros del brujo, escritos por el autor polaco Andrzej Sapkowski, les diré una cosa: ¡ya estáis tardando en leerlos! El juego nos mete en la piel de Geralt de Rivia, un brujo, tras los eventos vividos en las novelas y, posteriormente, en los dos primeros juegos de la saga (sacados para PC y Xbox 360, respectivamente). Los brujos son humanos que, tras pasar unas duras pruebas con todo tipo de bebedizos, venenos, entrenamientos y demás, se convierten en hombres de mayor fortaleza, con la capacidad de lanzar conjuros y de ingerir pociones que aumenten su visión en la oscuridad,
Así de bonica se ve Renania, la mayor ciudad del juego. Con burdeles y todo
su regeneración corporal, etc... ¿Y qué hacer cuando eres alguien así? Muy sencillo: cazar monstruos. Por tanto, el amigo Geralt se dedica a ir a lo largo y ancho del mundo dando muerte por encargo a todo tipo de bestias, desde brujas y trolls hasta grifos, demonios y espectros. En el juego nos dedicaremos a ir tras la pista de una misteriosa joven de pelo ceniciento muy importante para el protagonista (y hasta aquí puedo leer, como quien dice, para no revelar demasiado de la trama) mientras aceptamos todo tipo de encargos, nos metemos de lleno en encarnizadas batallas (y encarnizadas noches de pasión con todo tipo de mujerzuelas :P), aceptamos todo tipo de encargos y viajamos por el enorme mundo de The Witcher, excepcionalmente recreado a partir de las novelas que le dieron vida (solamente en ir de un punto a otro del mapa puede llevarnos 30 minutos a galope tendido).
Lamentablemente, no había demo que probar, y al entrar nos acomodaron en unas gradas de sillas donde pudimos contemplar un vídeo de media hora acerca de la demo, por primera vez en español, del juego). Pese a todo, Paco cumplió uno de sus objetivos que fue conocer y charlar con Nacho Ortiz, jefe de redacción de MeriStation, una popular web de videojuegos. Un tipo la mar de simpático y friki con el que pasamos el rato en la cola de entrada al evento.


 Y hasta aquí por hoy, que se está haciendo la cosa excesivamente extensa. Mañana procuraré escribir y subir la segunda parte de las vivencias durante la feria que, espero, os estén gustando.

¡Hasta otra!